Un corazón para Dios
1 Reyes 19.19-21; 2 Reyes 2.9
¿Quién era Elías?
Elías aparece en la
historia en el reinado de Acab. Acab era un rey malo que tomó por mujer a
Jezabel, hija del rey de los sidonios y fue y sirvió a Baal. Hizo un altar a
Baal. Hizo una imagen a Asera. Provocó la ira de Dios. Elías era un profeta de
Dios que oró para no llover por 3 años y no llovió y después oró y llovió.
Por causa del hambre en la
tierra por falta de lluvia, Dios lo mandó apartarse y esconderse en el arroyo
de Querit que está en frente al Jordán. Ahí ordenó para que cuervos lo trajera
pan y carne.
Elías fue quién profetizó
la multiplicación de harina y aceite en la casa de la viuda de Sarepta. También
resucitó al hijo de la viuda.
Elías oró y cayó fuego del
cielo contra los profetas de Baal (400) e de Asera (450). Otra vez, oró y cayó
fuego del cielo contra los guardias del rey Ocozias. 102 personas.
Fue quién ungió a Eliseo
por profeta en su lugar ha mandado de Dios
¿Quién era Eliseo?
Eliseo estaba trabajando en
el campo arando la tierra con unas yuntas de boyes y que Elías pasó por él y
sobre él puso su manto y recibió la unción lo cuál dejó todo para servirle
Un día Dios habló que iba
llevar a Elías y Eliseo no lo dejó un solo momento. Elías fuera despedirse de
su pueblo y se fue a Bet-el, Jericó y en estos lugares havia escuelas de
profetas y aunque Elías lo pidiera a Eliseo para que se quedara ahí, todavía él
no lo aceptó y siguió sirviéndolo. Hasta que, por fin, se fue al Jordán y apartó
las aguas con su manto, sin que ellos supiesen 50 varones hijo de los profetas
que miraban de lejos lo que ocurría.
Nada podría hacer con que
Eliseo dejase a su señor. Él havia dejado todo para seguir a Elías. Por causa
de su decisión y perseverancia, Elías preguntó cual era su petición y Eliseo no
pensó dos veces.
Él no lo pidió dinero,
tierras, caballos, ganados, ovejas, oro, plata, siervos, no, nada de eso, él
pidió lo que buscaba con mucha ansiedad, el poder que estaba en Elías, ese era
su mayor tesoro. Entonces, pidió doble porción de su espíritu sobre él.
Diferencia de nuestros tiempos
Esta es la diferencia de
los tiempos de los profetas para nuestros tiempos.
En el tiempo de los
profetas lo más importante era la presencia de Dios, por que cuando se tiene el
Espíritu de Dios se tiene abundancia de vida.
Hoy día, esta todo al revés
en las iglesias, hay una búsqueda desenfrenada por las cosas materiales. Los
hermanos vienen a la iglesia no para adorar a Dios y sí para pedirle
bendiciones como: carros, casas, ropas, novios, dinero, y otro, dinero sin
trabajar, lo que es peor.
Todavía, la presencia de
Dios, el gozo del Espíritu Santo, su poder, sus dones, nadie más lo buscan en
las iglesias. Eliseo dejó todo para tener la presencia de Dios y su poder con
él. Nosotros queremos el poder de Dios y sus dones, pero sin dejar nada.
Aprenda una cosa, estar en
la iglesia no es la misma cosa de estar en la presencia de Dios. Muchos están
viniendo a la iglesia como que así estoy yendo a la presencia de Dios, pero su
corazón esta lejos de Dios, su mente no está en el culto y aún quiere recibir
el Espíritu Santo.
Estar en la presencia de
Dios es una actitud del corazón.
El avivamiento vendrá en
nuestras vidas cuando nuestro corazón esté como de los apóstoles: unánimes juntos. Cuándo acontecer esto,
el Espíritu Santo vendrá y llenará a todos y el fuego de Dios caerá sobre
todos.
Cuando acontece esto, habrá
sanidad, liberación, bautismo con el Espíritu Santo, Poder de Dios y lo mejor
de todo, salvación de almas.
Em visita ao Blog do Dr. Francisco Gois, deparei-me com seu comentário sobre o Dízimo e gostaria de tentar ajudar a esclarecer melhor essa questão:
ResponderExcluirEIS O REGISTROS DAS PASSAGENS BÍBLICAS EM QUE O SENHOR JESUS ABOLIU O DÍZIMO, JUNTAMENTE COM TODOS OS MANDAMENTOS CARNAIS:
"A lei e os profetas vigoraram até João; desde esse tempo, vem sendo anunciado o evangelho do reino de Deus, e todo homem se esforça para entrar nele".
Lucas 16. 16
"Não penseis que vim revogar as lei ou os profetas; não vim para revogar, vim para cumprir".
Mateus 5. 17
Pela literalidade desses dois textos parece haver uma contradição entre ambos; contudo, pelo discernimento da Palavra viva e não somente letra, é possível chegar a seguinte conclusão:
O primeiro versículo indica que, em João encerrou a velha aliança composta de Leis e Profetas; posto que, uma nova e superior estava por surgir no sacrifício único e definitivo, pelo Sangue do Senhor Jesus na Cruz do Calvário.
No segundo versículo indica que, para que a maldição da lei fosse cumprida, o Senhor Jesus teria que cumprir toda a lei em nosso lugar, inclusive a nossa condenação eterna, por não existir um justo, nenhum sequer.
Sabendo-se que para aqueles que não aceitarem tamanha salvação não passará nem um i ou um til das Lei e dos Profetas. Porquanto, o restante da humanidade que desprezarem tamanha salvação pela Graça, serão réus da Lei e dos Profetas, até que passem o céu e a terra.
Com relação a nossa justiça exceder a dos escribas e fariseus, somente poderá ocorrer pela Graça.
Visto que, no encontro com o Senhor Jesus, no final da velha aliança e próximo a nova aliança no Sangue de Cristo, a elite de escribas e fariseus de Mateus 23. 23, foram condenados a perdição eterna pelo Senhor Jesus, não por cumprir a vigência da Lei Levítica, mas por neglingenciar os preceitos mais importantes da lei:
a justiça, a misericórdia e a fé. Ou seja, dizimavam a mais para esconder o que faziam de menos; isto é, surrupiavam as viúvas, os órfãos e os estrangeiros.
Quanto a Malaquias 3. 10, foi uma verdade no período veterotestamentário que dava validade ao dízimo levítico, entretanto se constitui em uma grande mentira no período neotestamentário, com grandes prejuízos para as igrejas evangélicas, tais como:
1- Enriquecimento de algumas congregações, com o perigo espiritual aos respectivos líderes, os quais são aprisionados pelo deus Mamom, pela avareza dos seus corações.
2- Falta de pastoreio espiritual no rebanho de Cristo, motivado pelo controle financeiro e também com ameaças de um certo devorador (diabo), e com a garantia de enviar ao inferno os membros que não contribuírem com no mínimo 10% de sua renda; visto que, são considerados ladrões todo aquele que não se submetem a passagem de Malaquias 3. 10.
3- Manutenção de um fariserismo pentescotal em detrimento de uma santificação interior, alimentado pela suposta compra de salvação através de pagamentos de dízimos como garantia de não perderem a salvação eterna.
Entre outros.
Paz Seja Contigo,
J.C.de Araújo Jorge